¿Desnudo total o parcial?
Qué tanto mostrar y qué cosas ocultar, es una cuestión que puede responderse de acuerdo a los gustos de cada quien. Pero no hay dudas de que una de las más poderosas y sensuales sensaciones asociadas con el sexo es el misterio. Muchos encuentran grandes emociones en la ropa sugerente y la manera en que luce, que en las partes de la anatomía que cubren, y es que extender la espera para develar esos secretos es algo que despierta pasiones y excita a cualquiera. ¡Aquí te contamos más!
¿Con ropa o sin ropa? Puede resultar curioso, pero para algunos, es más sexy ver a sus parejas con ropa, o con poca, mejor, que verlas desnudas por completo. El desnudo parcial es una herramienta perfecta para comenzar el juego previo, pues estimula el órgano más importante asociado al disfrute: el cerebro. Esa central nerviosa recibe los mensajes procedentes de todo el cuerpo, mensajes que anuncian que la estimulación está haciendo bien su trabajo.
Preguntarse cómo se ve la piel debajo de la ropa estimula tanto a hombres como mujeres. Por ello, la industria de las prendas y la lencería, así como de algunos accesorios para acompañar el look, es tan exitosa en el mundo de las tiendas que distribuyen mercancía erótica. No es casual que una imagen estandarizada de cualquier mujer sexy incluya ropa interior, tacones, bufandas y joyería, nada más, o sin camisas o franelas, para el caso de los hombres.
Y es que en el sexo, la sensación de la conquista y el desafío que supone llevar a cabo una aventura sexual o un encuentro erótico, a veces es más emocionante que la tarea en sí misma. A todos nos gusta imaginar cómo será esto o aquello, como se verá, se sentirá o percibirá de alguna forma. Esa incertidumbre es la clave de la mayoría de las sensaciones eróticas.
¿Quieres despertar la imaginación y la emoción en tu pareja? Prepara un sexy striptease para él o ella, en un ambiente a media luz, en su habitación. Recuerda que esto es parte del juego previo, y que el gran objetivo del erotismo no es el placer inmediato, sino la prolongación de las sensaciones. Desnúdate lentamente, de forma sugerente y al ritmo de alguna canción previamente escogida para tal fin, y recuerda que no debes quitarte todo, ¡Deja que tu pareja se encargue de eso!