Amigos con derecho a roce: una tendencia creciente
Tener una amistad con la que se ha tenido sexo al menos una vez se está convirtiendo en una tendencia muy popular, dada la aceptación que arrojan las estadísticas de numerosos estudios alrededor del mundo. Todo parece indicar que las mujeres y hombres del siglo XXI están aprendiendo a apreciar la esfera personal y sexual de una nueva manera, estableciendo claras distinciones entre las nociones de compromiso, placer y amistad, de modo que no se ven comprometidas ante un encuentro de tipo sexual. Aquí te contamos más.
El principal temor que genera una situación de amigos con derecho a roce es la posible pérdida de la amistad. Curiosamente, lo que se teme en la mayoría de los casos no es que el sexo arruine la relación, sino la posibilidad de que el encuentro derive en la creación de un vínculo amoroso (formal o no) que posteriormente concluya en malos términos. Sin embargo, chicos y chicas modernas parecen estar apreciando desde un nuevo ángulo la frontera entre el sexo y las relaciones en general.
Aquellos que defienden la postura de las amistades con sexo ya discuten abiertamente los argumentos que se han empleado en los últimos años para descalificar sus relaciones. ¿Por qué la actividad sexual y la amistad no pueden ir de la mano? A esta cuestión proponen varias consideraciones. Toda relación, amorosa o no, se basa en cosas tan elementales como el respecto, el conocimiento mutuo y la búsqueda de intereses comunes que van más allá del formalismo. De hecho, los miembros de una pareja deben considerarse amigos ante todo, lo que luego permite desarrollar lazos más profundos y duraderos. Si en las relaciones y el sexo de pareja prevalece la amistad, ¿por qué no proponer el sexo durante la amistad?
Adicionalmente, un lazo de amigos con derecho siempre debe contar con parámetros bien establecidos antes del inicio de la relación. Si dos personas son capaces de considerarse amigos y además mantener relaciones sexuales sin que sus vidas se vean alteradas en ningún aspecto, entonces no hay más razones para no darles luz verde.
Por último, no todos los vínculos de este tipo se deben considerar de la misma manera. Muchas personas aseguran que han tenido sexo con una amistad solo en una ocasión, y que tal encuentro íntimo no comprometió su relación previa. Luego están aquellos que tienen relaciones frecuentes con una amistad, bajo ciertas condiciones establecidas por ambas partes. Si consideramos el contexto y las características de cada caso, el espectro de posibilidades para los célebres amigos con derecho a roce es bastante amplio y complejo.
