Realidad: ellos adoran los pechos
¿Te has preguntado alguna vez por qué los hombres están fascinados y algunas veces, casi obsesionados con los pechos femeninos? Hay muchas razones, entre ellas porque ellos adoran las formas femeninas y porque los genes han creado que éstos sean la predilección de los varones, quedando el recuerdo de ellos en su memoria, desde el momento de la lactancia.
En las etapas de la Prehistoria y la Edad Media, aquellas mujeres que tenían senos más voluminosos y caderas más anchas, se consideraban más aptas para la reproducción, pensando que tendrían hijos más sanos y fuertes. Esta condición genética se ha conservado, como el romanticismo, la conquista y protección del varón, así como el instinto natural de la mujer para proteger a sus hijos. Ahora, los pechos más que una condición genética y su importancia biológica se mantienen como una sobrevaloración de la imagen, haciendo que la palabra sexy se corresponda a unos pechos voluptuosos. Las prótesis y las cirugías mamarias han aumentado, pero ellos todavía prefieren un tacto mucho más suave y un aspecto menos artificial.
Durante el acto sexual y mientras se tocan o estimulan los pechos, él puede llegar a duplicar la liberación de oxitocina, signo de que está sintiendo placer, sintiéndose mucho más cerca de su pareja. Es curioso que esta unión no se realiza mediante la estimulación de ninguna parte más del cuerpo de la pareja, siendo (como ves) muy enriquecedores los preliminares y la estimulación mediante besos, caricias y succiones suaves en la zona. No sólo ellos se ven satisfechos por esto y beneficiados a la hora de mantener un mejor sexo, sino que también ellas ven mucho más fascinantes sus relaciones sexuales. Una mujer que está mejor estimulada puede tener orgasmos mucho más intensos y satisfactorios y esto se nota en su actividad sexual. Podrás hacer que ella quiera tener sexo mucho más a menudo.
Aquellos hombres que son capaces de valorar el sentido estético de los pechos y que además de admirarlos saben cómo estimularlos, son mejores amantes, valorando no sólo la capacidad de hacer feliz a su mujer sino mostrando la sensibilidad que se merece al preocuparse del placer de ellas, logrando sesiones de sexo mucho más reconfortantes.
Siempre existe el debate de si el hombre prefiere unos pechos grandes o unos pechos pequeños. La verdad es que los hombres se fijan mayoritariamente en si el escote está terso y en si están erguidas o no, el tamaño es cuestión de gustos y puede variar entre clases sociales, entre grupos educativos y también entre personas de diferentes ideologías. Por ejemplo, aquellas personas que valoran mucho la apariencia física, preferirán unos pechos exuberantes, aunque éstos sean postizos y aquellas personas más románticas tendrán mucho más apego por las formas más naturales y femeninas. Los cambios sexuales que se dan durante el sexo también son muy importantes, puesto que excitan al hombre, haciendo que tenga un gran estímulo visual para concentrarse únicamente en el placer. El crecimiento de los pezones así como la hinchazón de los pechos hace que el varón se sienta como el rey del mambo, siendo una imagen todavía más efectiva para aumentar la libido, que el pene en erección para las mujeres.