Eyaculación retardada y eyaculación retrógada
Cuando la eyaculación no se realiza de la manera adecuada, con su respuesta habitual, puede existir la falta de eyaculación también denominada como eyaculación retardada o aneyaculación. La inexistencia de semen en los 30 minutos posteriores hace visible esta dolencia. En la eyaculación retrógada, mientras tanto, la eyaculación se realiza pero el camino de expulsión se realiza por la vejiga, mezclándose el semen con orina. Hoy vamos a hablar de cómo se originan estas dos patologías y qué remedios se aplican para solucionarlas.
Origen de la eyaculación retardada
Hay diversos factores que pueden producir la aneyaculación. Uno de ellos es el estrés emocional, las depresiones o el estar pasando por una etapa de mucha ansiedad. Aunque hay causas externas y dolencias del organismo que también influyen a la hora de mantener un sexo ideal, como el estar en tratamientos que ayudan al bloqueo parcial del proceso del orgasmo y la eyaculación, como los medicamentos de carácter hipotensores, los antidepresivos o las anfetaminas; otras veces también repercute en la respuesta eyaculatoria el hecho de haberse sometido a alguna operación como aquellas en las que se toca la vejiga, la arteria del abdomen inferior o la próstata. Por supuesto, el hecho de que se haya sufrido algún accidente y éste haya dañado la zona de la médula espinal, también podrá conseguir que se sufra de erecciones no duraderas y la incapacidad para eyacular. Es posible que, en su mayoría, los hombres que sufren de la aneyaculación, no hayan experimentado un orgasmo en su vida o desde que se generó el proceso de sentir esta dolencia, creando una doble ansiedad por perderse el placer del sexo.
Origen de la eyaculación retrógada
Normalmente la eyaculación retrógada ocurre como un riesgo en la mala curación de enfermedades o post-operaciones de la vejiga, la uretra o la próstata. Éstos pueden sentir un orgasmo a diferencia de aquellos pacientes que sufren de la aneyaculación.
Tratamientos para la eyaculación retardada y la eyaculación retrógada
Primero se realizará una psicoterapia para tratar de averiguar si él tiene este problema por causas psicológicas o físicas. Normalmente los casos menos graves se solucionan con algunos meses de terapia, ayudando a que el paciente termine con conflictos relacionados con ellos mismos, cerrando con los procesos sexuales que ocurrieron durante la adolescencia y la juventud. La solución que se puede aportar a ciertos traumas, será el motor que ayude a todos estos hombres a comenzar a disfrutar de nuevo del sexo en pareja.
Si el psicoterapeuta admira que puede ser un proceso biológico interno, se mandará al paciente para que realice diversas ecografías y pruebas médicas que verifiquen que su área genital así como la uretra están en perfecto estado. Un examen de la próstata será necesario para desechar complicaciones y problemas. Es importante que informes a tu médico o sexólogo/a de confianza de si estás tomando algún tipo de medicamento o de si eres diabético, muchas veces estas causas también ayudan a que el proceso eyaculatorio no sea fácil, encontrando un muro cansado de escalar para todos aquellos que quieren gozar de un sexo placentero y vital con su pareja. ¡Toma las riendas de tu sexualidad y comienza a vivir de nuevo una sexualidad satisfactoria y plena!
