Conviértete en una experta de la masturbación y vuelve loco a tu chico
Complacer a la pareja en la cama es una de las mayores preocupaciones de la mayoría de las personas adultas, y la masturbación es una de las técnicas de mayor uso para satisfacer a hombres y mujeres. Aunque pueda parecer un proceso muy simple y mecánico, masturbar exitosamente a un chico requiere de un conocimiento que, aplicado correctamente, puede hacer la diferencia entre algo rutinario y una experiencia que lo llevará a los rincones más elevados del placer. Atiende a los siguientes consejos para que tú también puedas enloquecer a tu chico. Si quieres masturbar a tu chico, la posición en que lo hagas tendrá una incidencia notable en el resultado de la experiencia. Algo que hace especial a la masturbación es que puede hacerse en contextos y situaciones muy diversas, y la espontaneidad puede incidir en que ciertas posiciones puedan usarse o no. En este sentido, es necesario saber cómo le gusta a tu chico: de pie, sentado, acostado, etc. Si esto no resulta ser una limitante de su parte, puedes arriesgarte y probar diferentes posiciones, y luego preguntarle cuál le ha gustado más. No sólo los chicos disfrutan con la masturbación. Una de las cosas que más disfrutan las mujeres es la sensación de poder que pueden ejercer al realizarla: tú controlas la situación, la postura y el placer, mientras él está a tu merced. Aprovecha esto para sacarle el mayor partido a tu rol activo: una manera de hacerlo es vendar a tu chico, de modo que, privado de la visión, sus otros sentidos se potencien. Un consejo importante es aplicar un poco de presión, ya sea con las manos o con la boca. A los chicos les encanta esa sensación de presión sobre el pene. La flexibilidad de la masturbación permite realizarla en contextos que son muy excitantes, y que generan grandes cantidades de adrenalina, un complemento ideal para el disfrute erótico. Masturbar a tu chico en la habitación no es lo mismo que hacerlo bajo la mesa del comedor, en el cine o en el auto. La sensación de exposición o de ser descubiertos hace la diferencia entre un encuentro regular de uno incomparable. Uno de los lugares preferidos por hombres y mujeres es la ducha. Puedes realizarlo como una sorpresa: entra mientras se baña, sin advertírselo. Tómalo por detrás, abrázalo y luego comienza a masajearlo con la espuma del jabón. Lentamente subirás la temperatura a medida que bajes tus manos hasta su pene. Aprovecha sobre todo el elemento sorpresa. Llévalo a una esquina de la casa y comienza a bajarle el cierre del pantalón. Si él no te detiene, ¡sabes que tienes luz verde para ponerte al mando! [wysija_form id=”2″]
Mmmmm mejor asme un experto para volver loca a la chica que le gusta compartir conmigo
wow mi imaginacion esta haciendo de las suyas…. gracias por el dato
creo que el acto sexual es un arte,tanto el varon como la dama deben de usar la imaginacion para encontrar cada vez nuevas formas y no caer en la rutina y asi
tratar de hacer feliz a la pareja