Impotencia en la tercera edad
Vamos a hablar de las soluciones para luchar contra la impotencia en la tercera edad.
La edad es uno de los factores más determinantes a la hora de hablar del rendimiento sexual de una persona. Aunque las mujeres suelen ser más estables en ese sentido, presentando sólo algunos problemas de libido en la etapa de la menopausia, los hombres pueden verse más mermados en este sentido, ya que pierden la resistencia a la erección, mostrando los primeros signos de la impotencia en la tercera edad.
El rendimiento sexual es algo que los hombres tienen muy en cuenta, aquellos que no son capaces de mantener una vida sexual activa se culpan, creando todo tipo de ansiedades y también de miedos, que acarrean una gran falta de autoestima.
Soluciones para la impotencia en la tercera edad
La impotencia en la tercera edad se puede curar, aunque no siempre es posible, si el defecto proviene de una dolencia física, hay ciertas enfermedades como la depresión, la diabetes o también los problemas de próstata que hacen que aparato reproductor masculino se atrofie, teniendo que curar previamente estas enfermedades para hacer que todo funcione.
La adaptación es uno de los principales sentimientos que se debe practicar para poder caminar hacia una buena dirección. Es normal que a través de la edad se experimenten cambios, a medida que se van adquiriendo más años, viéndose la movilidad reducida así como la pérdida de deseo y todo tipo de emociones negativas, con las cuales siempre se puede trabajar para lograr un resultado positivo.
La impotencia en la tercera edad, se trabaja con el amor como base fundamental y también con el respeto y la paciencia que se necesita para que la relación funcione con total armonía. En el caso de uniones felices, no será necesario el mencionar que el amor todavía se puede mantener con otro tipo de prácticas que no sea la penetración. Muchas personas se centran en éstas como la única solución para todo tipo de prácticas sexuales, sin tener en cuenta los masajes eróticos así como el petting o la simple exploración del cuerpo de la persona amada.
Pero… ¿con qué sentimientos se debe trabajar en las parejas felices? ¿cómo enfrentarnos a ellos y qué es lo que ellos sienten?
Al hablar de impotencia en la tercera edad, nos encontramos con que ellos sienten:
- Ansiedad: esta emoción junto con el miedo se crea cuando no se logra cumplir con las propias expectativas sexuales, logrando una sensación de humillación e impotencia, formándose la ansiedad en todo momento cuando se quieren lograr los resultados y no se pueden conseguir.
- Perturbaciones mentales y violencia: La violencia es otra de las emociones y respuestas que se establecen cuando no se produce la aceptación de algo que está sucediendo, manteniéndose con los ojos cerrados, cuando los demás “son los culpables” y el que de verdad está sufriendo el problema se siente solvente, ataca, creando de esta manera una barrera defensiva difícil de romper si no es con ayuda psicológica. Los trastornos de personalidad también pueden llegar a ser otros de los indicios de este tipo de violencia.
- Caída del ego: el ego masculino suele llegar a ser muy frágil por lo que es necesario trabajar en ello para que no se convierta en un problema. Una persona que siente que su ego ha sido ofendido, se siente menos, queriendo hacer que los demás se sientan culpables de su “desgracia” Tan sólo ofendiendo a los demás se logrará el alivio, ya que así los demás estarán tan mal como ellos.
