Masajes eróticos para él: masaje lingam
Si quieres aumentar su placer y buscar nuevos métodos para hacer que sienta deseos por ti de nuevo, hoy vamos a recomendarte una de las técnicas más antiguas para incrementar la pasión de un hombre y lograr que obtenga un orgasmo totalmente placentero, el masaje del lingam, una de las muestras del arte tántrico que te permitirá hacer que vuelva a estar loco por ti, si también pasáis por un momento de monotonía y falta de innovación sexual.
Antes de nada, deberás saber que al igual que el masaje del yoni, la principal búsqueda del masaje del lingam, no será el orgamo absoluto, sino la búsqueda del placer y la relajación absoluta del cuerpo, para así crear una sensación de mayor excitación y complicidad más plena. Para poder realizar el masaje de una manera efectiva, él tendrá que tumbarse de espaldas, dejando el cuerpo boca arriba con las piernas ligeramente separadas. Como en el masaje para ella, la mujer deberá centrarse en acariciar la zona interna de los muslos así como el vientre, los pectorales y los hombros, tras estos pequeños pasos, ella deberá aplicar un poquito de lubricante en la zona de los testículos y el pene, creando un suave masaje en las dos zonas, acariciando también el perineo y el hueso púbico.
El siguiente paso será acariciar de forma pausada y después con más ritmo la base del lingam u ógano genital masculino y luego la cabeza, aunque todo con mesura, ya que no se buscará la eyaculación rápida, realizando el masaje en otra parte del cuerpo si fuera necesario. A la vez que se acaricia el perineo con una mano se acariciará el lingam con la otra, buscando una estimulación completa, que terminará tras dedicarle mucho tiempo en un orgasmo muy satisfactorio y mucho más fuerte. ¿Conocías estas técnicas de masaje tántrico?
