Posturas sexo tántrico: en el sofá

5 junio, 2015/ Ana Perez / Mejor Sexualidad / 0 comments

Si estás buscando inspiración para realizar sexo tantra en el sofá, este artículo es el que estabas buscando, ya que hoy compartiré contigo las mejores posturas del sexo tántrico para hacer el amor en el sofá. Te pueden servir de inspiración, ¡así que mantente atento/a para realizarlas!

Buscar la sorpresa: en esta postura sexual tántrica, ella se coloca tumbada con las caderas y las piernas en el borde del extremo del sofa, dejando que cuelguen hacia el suelo, la cadera debe estar expuesta y la cabeza apoyada. Él se coloca semi arrodillado enfrente de ella, el truco es comenzar por acariciar su vientre y realizar juegos sexuales como besos, caricias o estimulaciones con lubricantes de efectos frío-calor en el ombligo. Esta postura es la ideal para realizar sexo oral, ya que él irá bajando hasta el pubis, para estimular la vulva y el clítoris.
En la postura del placer, ella deberá colocarse sentada en el borde del sofá, mientras él se sitúa enfrente de ella, tomándola de las caderas, para acercarle a él y sujetarle las piernas que se dejarán sueltas apoyadas en cada lado de él. Esta postura es muy placentera para ambos, ya que permitirá un ángulo de penetración muy atractivo en el que él sentirá al máximo y en el que ella verá totalmente estimulado su clítoris logrando el orgasmo conjunto.
La doma ambos sentados, se realizará con él sentado y ella sentada encima de él, enrollando las piernas detrás de su espalda o apoyándolas en cada lado de él, como si estuviera de cuclillas. Ambos mirándose a la cara será mucho más fácil besarse y comunicarse todo tipo de sentimientos de manera más profunda.
La posición de la Diosa atrapada, esta será otra de las posturas sexuales más satisfactorias para ambos, ya que él podrá colocarse tumbado, mientras ella se coloca con las piernas abiertas encima de él, levantando los brazos hacia atrás pudiendo sentir su rostro, rodeándole el cuello. Él podrá sentir el ángulo de la espalda de ella así como sus glúteos, algo que le encantará.
En el sofá también se puede practicar la postura del perrito, en la que ella se colocará con las pantorrillas totalmente apoyadas en el sofá, con las caderas expuestas hacia él, apoyando sus brazos en el extremo del sofá. Él accederá a la penetración poniéndose de rodillas, por detrás, tomándola a ella agarrando su espalda o cuello, tomando el ritmo de la penetración, que será muy profunda y excitante para ambos, siendo más cómodo de realizar que en el suelo o la cama.
La postura tántrica pasional, se realizará cuando ella apoye su tronco y cabeza en el borde del sofá, mientras él se coloca detrás, tomando una de sus piernas por el pie, levantándola y apoyándola en un lateral de su cadera, dejando la vulva expuesta. La otra pierna permanecerá apoyada en el suelo. Esta posición es también muy excitante porque él puede tomar el ritmo, creando una eyaculación rápida pero intensa, en la que ambos disfrutarán mucho la penetración, siendo algo nuevo y sexy.