Posturas sexuales para Aries, Sagitario y Virgo
¡Seguimos describiendo para vosotros las mejores posturas sexuales según cada signo del zodíaco! Esta vez para todos aquellos y aquellas que sean nativos/as de los signos de Aries, Sagitario y Virgo. ¡Si las ponéis en práctica lograréis satisfacer a vuestra pareja al máximo, logrando del 60% al 80% de compatibilidad si sólo un miembro de la pareja es de este signo y hasta el 95% si ambos sois del mismo.
Posturas sexuales para Aries:
Los Aries buscarán siempre la innovación con posturas que les hagan salir de la monotonía, hay tres que serán de la preferencia de este signo, comenzando por la postura de la amazona, siguiendo por la del trapecio y terminando por la del perrito. En la primera, ella tomará las riendas sentándose encima de él mientras él está tumbado sobre la cama, procurando mantener un ángulo de las piernas lo más abierto posible. Podrá controlar mejor la penetración y alcanzar una penetración mucho más placentera. La postura del trapecio, se distinguirá porque él tendrá que sentarse con las piernas estiradas y entreabiertas. Ella tendrá que colocarse encima de él, echándose hacia atrás y apoyando las manos en el suelo, logrando una nueva forma mucho más atrevida de tener sexo. El perrito es la penetración vaginal con ella arrodillada.
Posturas sexuales para Sagitario:
Los y las Sagitario disfrutarán con la postura del tornillo y la postura profunda; en la primera, la mujer debe colocarse hacia un costado ladeada hacia el borde de la cama, dejando caer las piernas a un lado, él con las rodillas ligeramente flexionadas, se acoplará a ella y realizará la penetración (es similar a la postura de la cuchara) En la segunda, ella elevará las piernas al máximo, apoyándolas en los hombros de él, creando la penetración más placentera para ambos.
Posturas sexuales para Virgo:
Los y las Virgo podrán alcanzar el mejor orgasmo gracias a posturas tales como la fusión y la cuchara. Mientras que en la primera, ambos estarán sentados en el suelo, él en ángulo recto y ella recostada ligeramente hacia atrás apoyando las manos detrás de su cabeza, creando mucho placer gracias a que ambos intervendrán en el control del ritmo de la penetración, la segunda consistirá en una penetración ambos recostados de lado y él abrazándola acoplándose a ella.