Rarezas sexuales que sí pasaron en el dormitorio, ¡historias reales!
Hay historias reales, las cuales muchas pasan por la consulta de los sexólogos y sexólogas más reputados/as que te sorprenderían, muchas de ellas en Inglaterra, han pasado a formar parte de programas especiales en los que se conmemoran los peores desastres sexuales de la historia. ¿Quieres conocer cuáles han sido?
Kate, una joven de Londres, estaba en un momento amoroso, un tanto privado con George, cuando un compañero de piso llamó a la puerta y ella le mordió en los genitales al asustarse. Se dice que George tuvo que acudir a que le dieran puntos al hospital envolviendo su miembro en una toalla que no paraba de cubrirse de sangre. ¡Algo inédito para los acompañantes de la sala de espera! Un contratiempo que asegura que todas las parejas deberían comenzar a practicar sexo, ¡sólo cuando puedan disfrutar de total intimidad y seguridad!
En otra casa de Londres, Richard, comenzó a estornudar compulsivamente tras eyacular. Su novia, Adele, no le dio importancia, hasta que días más tarde la anécdota se repitió. La respuesta es que hay hombres que son alérgicos a su propio semen, provocando una reacción en cadena similar a la de cuando se entra en contacto con el pelo de gato, el polen o los ácaros, en personas sensibles a estos componentes.
Otros de los desastres sexuales frecuentes, ocurrieron cuando Mary se dio cuenta de que su pareja Jerry, con quien llevaba saliendo dos meses, tenía micropene, por lo cual era imposible hacer el amor. Un hecho terrible si aún viéndola en erección era extremadamente pequeña. ¿Qué hacer en estos casos? La paciencia y el estar dispuesto a probar diferentes juegos sexuales, puede ser una optativa, si de verdad amas a tu pareja. Hay casos femeninos, como el vaginismo, que impide tener sexo con penetración, por lo que la comunicación y la compenetración serán vitales para crear buen sexo con tu pareja.
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