Sexo de altura
Si tuvieses que tomar un vuelo transoceánico de 12 horas, ¿qué es lo primero que vendría a tu mente? ¿Estadísticas de accidentes? ¿Jet-lag? ¿O acaso pensarías en tener sexo en el baño del avión? A todo el mundo le intriga el Triángulo de las Bermudas, pero las fantasías sexuales en aviones están tomando fuerza, y han logrado colarse en la lista de aventuras eróticas por cumplir de muchas personas. De modo que si pensaste en coquetear con tu acompañante de vuelo, no te extrañe que sea él o ella quien comience con la conversación.
Detrás de esta fantasía hay muchas razones. El sexo siempre es una alternativa muy atractiva para todos, y en un avión hay muchos motivos para inclinarse al erotismo. Saber que estás a miles de pies de altitud, en un espacio reducido y con un par de decenas de personas cerca que podrían encontrarte en plena acción en cualquier momento, todo eso hace que la adrenalina corra, lo que hace de la experiencia algo muy tentador como para no intentarlo al menos una vez. Así que no todo es culpa de Leonardo Di Caprio en El Aviador: el cine y los medios hacen su parte, pero nuestra imaginación nunca se queda atrás.
De hecho, tener sexo en pleno vuelo se ha hecho tan frecuente en los últimos años que muchas aerolíneas han comenzado a ofrecer servicios especiales para satisfacer esta demanda. Algunas compañías han creado vuelos específicos para tal fin, donde se pone a disposición de los interesados a un piloto discreto y una nave totalmente equipada para el amor, con champaña y chocolates incluidos. Otro ejemplo conocido es el célebre Speed Dating o citas rápidas, donde cada persona tiene alrededor de un minuto para presentarse y hablar de gustos y detalles con algún chico o chica antes de que suene la campana y pase a la siguiente. Esta modalidad de citas ha llegado también a los aviones, donde han reemplazado las mesas y sillas con los asientos de pasajeros.
La tecnología también ha comenzado a apoyar a los amantes de las alturas con la creación de varias aplicaciones que facilitan el proceso de conocer a un candidato potencial para el romance, incluso antes de abordar el avión. Así que lo único que necesitas es valor, todo el empuje adicional está al alcance de tu mano.