¡Evita el dolor de espalda!
¡Atenta! El dolor de espalda es una de las afecciones más comunes actualmente, sobre todo en las personas que están más propensas al estrés y al agite de un día a día muy absorbente. Si no se sufre de alguna lesión grave o padecimiento crónico, es muy sencillo evitar y deshacernos de esa molestia.
Lo primero que se debe cuidar es la posición en la que se duerme. Los especialistas están de acuerdo en que una de las mejores posturas para que la espalda no sufra daño mientras dormimos es de lado, colocando la cabeza en una almohada que no sea muy alta, con las rodillas flexionadas, es decir, en posición fetal. También es recomendable dormir boca arriba, pero en este caso lo mejor es contar con una almohada gruesa. Lo que se debe evitar a toda costa es acostarse boca abajo, ya que es muy perjudicial sobre todo para la zona lumbar.
Además, es esencial que procuremos no levantarnos apresuradamente de la cama. Lo mejor, no sólo para la espalda sino para el cuerpo, es incorporarnos lentamente cuando nos acabamos de despertar, tomar un tiempo prudente para salir del estado inerte que supone estar dormido. Asimismo, mientras estás en la oficina o si tienes que permanecer mucho tiempo sentada, puedes utilizar un cojín o almohada pequeña, que sea ergonómica y que pueda brindar un buen soporte a esa zona de nuestro cuerpo; aunque tampoco es conveniente que estés en una silla por largos períodos, acuérdate de levantarte de vez en cuando para caminar algunos minutos.
Es importante que no abuses de los tacones. Son un elemento que pueden ser un gran aliado de la mujer, ya que no sólo te hacen parecer más alta, sino que dan un toque elegante a tu look y estilizan tu figura. Pero como todo en exceso no es beneficioso, si usas constantemente este tipo de zapatos, los arcos naturales de la espalda pueden sufrir distintos tipos de lesiones.
Por último, sin duda uno de los consejos que más nos pueden servir es el de mantener siempre una postura adecuada, no sólo al dormir, sino cuando caminamos o sobre todo cuando estamos sentadas. Así que mantén tu tronco reposando en el respaldar de la silla, los hombros relajados y el cuello y la cabeza en posición recta, para que puedas olvidarte de ese molesto dolor de espalda.
Creo q x la cesarea, me duele mucho