¿Solución para la incompatibilidad sexual?
Muchas veces en las parejas puede existir una cierta incompatibilidad sexual que se manifiesta por el descontrol y el desorden en la unión de los deseos de la pareja, provocando que no se llegue a acuerdos a la hora de vivir una de las expresiones más comunes en una relación o un matrimonio. En términos profesionales, a esto se le denomina como disritmia, una diferencia en la apetencia sexual de una pareja, presentándose problemas que podrán tener solución, si se busca una nueva rutina para los dos miembros de la relación.
Muchos confunden el término con la discronexia, aunque ésta se refiere a cuando sólo un miembro de la pareja siente esta falta o aumento del deseo considerable y la otra persona no es capaz de lidiar con la situación. La necesidad de someterse a terapia, siempre será decisión de ambos y tan sólo deberá hacerse cuando la terapia sea totalmente necesaria, en casos graves y en los momentos en los que el método de vivir influya notablemente en la calidad de la relación, provocando discusiones y todo tipo de enfrentamientos, estando a peligrar seriamente el desarrollo de la relación.
No supondrá un peligro si son desacuerdos que pasan de vez en cuando, por estar padeciendo una etapa de estrés o de enfermedad así como cuando hay revuelos en la vivienda que impiden el estar tranquilos y mantener una intimidad adecuada. Cada pareja deberá aprender a mantener su salud romántica y sexual, valorando cada día como si fuera un nuevo comienzo teniendo en cuenta los límites, los defectos y también las virtudes de cada miembro que conforma la unión.
Si habéis sobrepasado el número de discusiones por este motivo y queréis ir a terapia, estudiaré vuestra rutina, deseos y pensamientos que os estén perturbando, para así realizar un diagnóstico de la realidad que os ayude a solucionar la incompatibilidad.
