¿Cómo disimular un amor en la oficina?
Hace algún tiempo en Sexxóloga te hablábamos de las ventajas y desventajas de tener un amor en la oficina. Ahora sabrás a qué atenerte si te ves en esta situación, pero… ¿qué hacer si ya habéis sucumbido y no podéis resistiros a estar juntos teniendo obligatoriamente que encontraros a la mañana siguiente? Sabemos que habrá diversos trucos que te ayudarán a salir triunfante de la situación, si los aplicas de una manera segura y prudente. ¡Sigue leyendo!
1. Intenta no ser demasiado efusivo/a
La mayoría de las veces, el corazón y la espontaneidad nos suele jugar una mala pasada, teniendo que enfrentarnos a saludos demasiado evidentes, que hacen que nuestros sentimientos se vean delatados. Si ambos trabajáis en la misma planta, sé mucho más reservado/a y evitar miraros durante muchos segundos fijando la vista y la sonrisa, un simple “Hola” o un “Buenos días” delante de los demás con una leve sonrisa será mucho más correcto y os ayudará a mantener una relación en secreto, sobre todo si vuestra empresa es muy conservadora y posee una ética laboral.
2. Deja los roces y las expresiones de cariño para la intimidad
Por supuesto, intenta mantener el control, no llamándoos por nombres cariñosos en el trabajo, escondiendo esa intimidad aunque estéis solos, ten en cuenta que en las oficinas siempre podrán entrar personas de otros departamentos, por lo que será mejor que no os arriesguéis. Aunque tengáis ganas de rozar vuestras manos o daros un abrazo, no dejéis que esos instintos afloren, ya que vuestro puesto podrá correr seriamente peligro. Se admiten mensajes a los teléfonos móviles personales, en los momentos de descanso, algo que no podrán ir a verificar o a probar, ya que tan sólo lo veréis tú y él.
3. No hables de forma cariñosa en público
Camuflar un romance en el trabajo, puede ser difícil pero no imposible. Cuida también tus gestos y tu lenguaje corporal, ya que podrían generar un problema, si ven que estáis muy pegados el uno al otro, creándose una especie de sospecha. El tono de voz (más acaramelada) también puede ser otro de los signos que te delaten, intenta mantener una voz neutra. De este modo si equlibras la balanza y tratas a tu pareja en el trabajo como alguien más, nunca podrán saber nada, asegurándoos vuestra estabilidad.
4. No hagas halagos gratuitos
En los halagos, también encontrarán un detalle curioso para descubriros, por ejemplo si en tu boca está siempre el nombre de esa persona que te gusta o con la que estás saliendo y no puedes reprimir evitar hacer comentarios positivos acerca de su trabajo, haz un ejercicio de respiración y toma unos minutos antes de celebrar su buen hacer. Si lo haces de manera continuada (aunque sea de manera espontánea y natural, habrá más probabilidades de que levantes la señal de alarma) Si no puedes evitar comentar lo bien que lo pasaste el fin de semana, con tus mejores compañeras (en el grupo que ya tengas formado en el trabajo) habla en general de “tu pareja”, sin dar rasgos físicos o personales que puedan identificarlo con la misma persona de la oficina y nunca des su nombre. Ese será el comportamiento a adoptar si vives una relación de pareja con un compañero/a de trabajo.
5. No caigas en comportamientos posesivos
Si ves que él o ella tiene que ir a atender una llamada o una visita y es un hombre, no desesperes. En un entorno laboral es normal que tu pareja tenga que enfrentarse a todo tipo de responsabilidades, teniendo que lidiar con ellas con carácter y amabilidad. Nunca te muestres posesivo/a por ello, después de las horas laborales. Es vuestro trabajo y tenéis que contestar y dar buena imagen.