Relaciones: Cómo evitar el miedo a dar el primer paso.
Nadie nace sabio en el amor, esa es una regla que todos conocemos y como en todo en la vida, es una necesidad el tropezar para no caer en la misma piedra o simplemente para avanzar. Dentro de la mente de una persona, existen muchos sentimientos y conflictos a la misma vez, algo que hace que seamos complejos por naturaleza y que las señales que damos día a día sean ambiguas y nada esclarecedoras. Por ello muchas personas temen dar el primer paso a la hora de mostrar sus sentimientos. La vulnerabilidad que crea que otro/a sepa nuestros sentimientos y confesiones más secretas hace que nos sintamos desprotegidos y muy indefensos, ante los nuevos comentarios que él o ella haga. Las burlas o el rechazo son otros de los primeros miedos que suelen aparecer, cuando la alarma del “me gusta” aparecen. ¿Qué hacer en contra de esto?
Intenta liberarte de las dudas emocionales, ya que son una respuesta que el organismo recrea ante la sensación de miedo. Darle más énfasis no sólo creará una importante desorientación en ti, sino que también hará que te estanques. Sé libre de decidir, de actuar, de equivocarte y no sentirte mal o culpable por ello. ¡Recuerda que eres humano/a y hay cosas que por supuesto, estarán fuera de tu control! Cuando hayas serenado los ataques de pánico o de ansiedad, será el momento de trabajar en las afirmaciones positivas. Primero, debes entender que el no ya lo tienes, asi que el intentarlo no te va a eliminar ni a aportar nada. Por supuesto si sale bien te llevarás una alegría y si sale mal, te entristecerás, pero eso será otra etapa. En esta fase, piensa en actuar y en no valorar únicamente el desastre. Después si podrás pensar en lo que podrá pasar, aunque de manera equilibrada. En este caso, trabaja únicamente con tu razonamiento y sin emociones, elaborando una lista que puede ser de gran ayuda, colocando en una columna los hechos positivos y en otra lo que pudiera salir mal. Una vez la hayas leído, deshazte de ella y asume que todo puede pasar.
A estas alturas ya estarás preparado/a para afrontar todo lo que pueda pasar, así que estudia de forma disimulada a la persona que te gusta. Entérate de si tiene pareja, algo importante antes de dar un paso en falso y si está comprometido/a. Muchas veces es algo que ya se nota de manera instintiva, por ejemplo, las personas solteras se implicarán más, tanto en el trabajo como en los amigos, mientras que aquellas personas que tienen una relación o están casados, tendrán más responsabilidades y muchos más cargos emocionales, viéndolos más estresados y ocupándose de más cosas a la vez. Una persona con más cargos también tendrá menos energía vital, también si vigilas esto podrás notar si tiene una relación que lo/la agota. Algunas veces tan sólo basta un poquito de intuición y astucia para notar situaciones sin equivocarse ¡y esto estará en las vivencias del día a día! Si no tienes oportunidad de verlo/la, intenta tantear a la persona el poco tiempo que lo/la veas, funcionará, sobre todo antes de actuar y conquistar a la persona que te gusta.