¿Cómo evitar los complejos?
Los complejos son un sentimiento común en algún momento, tanto de la vida de una mujer como del hombre, produciéndose tanto en la vida sentimental como en la laboral, así como en diferentes momentos de la vida, durante la adolescencia, en los primeros amores o en cambios inesperados tanto en el trabajo como en la vida social. Hay diferentes trucos para liberarte de ellos, ante todo piensa en ti mismo/a como un ser auténtico y especial.
Piensa que aunque no todo el mundo tiene un cuerpo fantástico, ni unas medidas perfectas, sí se distinguen por otras razones entre la multitud, como puede ser un gran sentido del humor, un cabello perfecto, unos ojos que comunican o incluso una perfecta sonrisa, algunas veces las cualidades sociales son mucho más importantes: como una gran capacidad para hablar en público o una personalidad brillante con gran facilidad para hacer sentir bien a los demás. Lo mejor que puedes hacer, por lo tanto, es siempre potenciar todo aquello en lo que seas mejor, y enfatizar la parte de tu cuerpo que te gusta. Si amas tu sonrisa, usa un labial o un gloss que resalten tus labios, si son los ojos delinéalos de una manera especial, si son tus piernas alíate a la utilización de los shorts y las minifaldas con medias o sin ellas en verano…
Aprende también a ser natural y no parecer forzado/a en las situaciones que más te incomoden, de esta manera tu personalidad será más accesible y no causarás rechazo. Fíjate, por ejemplo, en los testimonios de los famosos/as de la televisión. ¿Por qué aquellos/as que son creíbles, cuentan la verdad y se muestran tal como son ganan más adeptos que aquellos/as que sobreactúan y resultan más cargados? En la vida real pasa lo mismo y además quien de verdad te quiera ¡te querrá por aquella que seas y no por lo que él/ella quiera transformarte!
