Curiosas costumbres de pareja
Luego de pasar cierto tiempo junto a una pareja, suelen desarrollarse de forma natural ciertas costumbres que pueden resultar “raras” para la mayoría, prácticas sólo comprensibles por ti y tu compañero o compañera. Estas curiosidades en una relación no son concebidas como rarezas, más bien atienden a otros motivos, asociados al aumento de la confianza, de la complicidad y a la creación de un mundo donde tú y tu pareja son lo único que importa. En Sexxologa hemos preparado un pequeño listado con algunas de las más comunes.
1- Lenguaje secreto y códigos: muchas parejas comienzan a usar palabras clave para hacerse llegar mensajes entre sí, especialmente cuando se encuentran en espacios públicos y contextos sociales. Casi siempre se comienza con palabras fortuitas a las que se añade un nuevo significado, algo simbólico y solo comprensible por ambos. Su uso inicial casi siempre se corresponde con situaciones cotidianas pero privadas, restringido a la vida de la pareja, y pronto se comienza a emplear en situaciones públicas, aprovechando el hecho de que nadie más comprenderá lo que se están transmitiendo de forma cifrada.
2- Apodos: los sobrenombres y apodos son una costumbre frecuente en las parejas. La mayoría se contenta con los clásicos: “cariño”, “cielo”, “amor”. Mientras algunos se inclinan por los más cursis, otros optan por alternativas menos frecuentes, empelando nombres de personajes, televisivos o literarios, o incluso inventando algunos nuevos. Muchos de estos apodos pueden parecer ridículos y son motivo de burla de parte de familiares y allegados, pero tienen un significado profundo en la pareja.
3- Pensamiento sincronizado: ¿Nunca has terminado una frase iniciada por tu pareja? Luego de pasar cierto tiempo en una relación, resulta normal que conozcas tan bien a tu compañero o compañera que sepas cómo reaccionará ante algo, que te anticipes a sus comentarios, que compartan opiniones y que piensen de forma similar. No resulta de un intento de imitación, sino de un lento proceso de sincronización que va de la mano con ese famoso “lazo” que creamos en una relación de pareja, y que va más allá de llamarse novio y novia.
4- Compartir prendas, ropa o calzado: una de las primeras cosas que las parejas emplean para demostrarse confianza es compartir la ropa. No es como el típico cliché del cine, donde la chica toma un café con la camisa de su compañero. En la vida real, las parejas usan prendas del otro de manera cotidiana, al principio por necesidad o como experimento, y luego como costumbre, y como parte de esa idea de que “todo lo mío es tuyo” y viceversa.