Saca el máximo provecho a la masturbación
No es extraño que se menosprecie las ventajas y las muchas bondades que ofrece la masturbación femenina. En el pasado, esta práctica fue rechazada con todo tipo de argumentos negativos, que no sólo la convirtieron en tabú, sino que sirvieron para mutilar nuestro disfrute del placer y del sexo hasta hace no muchos años. Hoy, la masturbación es entendida como parte de nuestra inclinación natural al placer, pues la autosatisfacción es solo una manera que nos permite estar más cerca del disfrute, cuando queramos y donde queramos. Y si quieres sacar el mayor provecho de ella, atiende a los siguientes consejos que Sexxologa ha preparado para ti.
El ritmo es un elemento crucial para que una mujer se acerque cada vez más al preciado orgasmo. El clímax no es una meta sencilla de alcanzar, y parte del esfuerzo necesario depende en gran medida de la disciplina y del ritmo, constante y sostenido. Comienza suavemente, con movimientos circulares y lentos, permítete reconocer la zona, literalmente, como la palma de tu mano, y tú misma notarás cómo el ritmo aumenta a medida que se eleva el placer. Tu trabajo es sentirlo y mantenerlo, sin apuros, solo entrégate a ti misma.
Por supuesto, sabemos que erotismo tiene zonas clave, esos lugares que nos brindan más placer que el resto. Sin embargo, descartar el resto de nuestra anatomía sería desperdiciar gran parte de nuestro potencial erótico y de nuestra capacidad imaginativa. Conocer nuestro cuerpo es un requisito indispensable para saber qué es lo que necesitamos y cómo usarlo para llegar al clímax, y la autosatisfacción nos ofrece una oportunidad ideal para explorarnos como lo merecemos. Desnúdate, y tómate todo el tiempo que necesites para recorrer con tus manos cada milímetro de tu piel. Detente en aquellas áreas que te ofrezcan las mejores sensaciones y recuérdalas al momento de ir bajo las sábanas, sola o en pareja.
Las chicas disfrutan de diversos tipos de estimulación, y mientras más numerosas y variadas son las fuentes, más fácil es acercarse al orgasmo. La masturbación, por sí misma y ejecutada de la manera adecuada, es un placer grandioso, pero si lo acompañamos de un ambiente seductor, con diversos detalles que inviten al erotismo mediante la excitación de nuestros sentidos, es más que segura la obtención de una experiencia gratificante, memorable y, sin dudas, repetible.
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